Editorial Educación

El cuento del ingreso libre a las universidades

Una demagógica e irrealizable promesa electoral

El cuento del ingreso libre a las universidades
  • 22 de abril del 2022


Es innegable la caída de la popularidad del presidente Castillo: según las últimas encuestas cerca del 80% de peruanos desaprueban su gestión. Ante ello, el presidente parece haber optado por volver a algunas de las muchas promesas que hizo durante la reciente campaña electoral, y que de alguna manera le ayudaron a conseguir el triunfo en la segunda vuelta. Una de esas promesas, hacían ganar muchos aplausos en las plazas públicas, es la de reducir los sueldos de los altos funcionarios del Poder Ejecutivo, entre ellos los ministros y el propio presidente. Otra de esas promesas era la del “ingreso libre” a las universidades estatales; es decir, sin concursos ni exámenes de ingreso. Son dos promesas que Castillo nunca cumplirá, aunque por muy diferentes motivos.

¿Por qué el ingreso libre es imposible actualmente? Comencemos por el número de egresados de educación secundaria. En el último examen de admisión a la Universidad de San Marcos hubo más de 26,000 postulantes, y solo lograron ingresar 4,500 de ellos. En otras palabras, si el ingreso hubiera sido libre, el número de nuevos estudiantes se habría multiplicado casi por seis. En cinco años o seis años (lo que dura los estudios superiores), toda la población universitaria se habría multiplicado por seis, por lo que las universidades necesitarían también multiplicar toda su infraestructura: seis veces más aulas, seis veces más locales, seis veces más libros y bibliotecas. Y también su personal: seis veces más profesores, seis veces más personal administrativo, etc.

Por supuesto, para ello se necesitaría multiplicar por seis el presupuesto que el Estado asigna a todas las universidades públicas. Y ese es el gran problema de la propuesta. En un reciente artículo publicado en El Montonero, el educador Guillermo Molinari lo ha dicho claramente: “Muy pocos se han referido al costo que representaría para el Gobierno implementar una medida como esta, y menos de dónde saldrían los recursos. Según cifras del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), el gasto público promedio per cápita en la educación superior universitaria a nivel nacional es de S/ 9,200 anual por estudiante”. Es decir, que el ingreso libre a la Universidad de San Marcos de solo este año le significaría al Estado un gasto extra de S/ 200 millones anuales.

Otro punto que no se menciona en la propuesta es la gran importancia que tiene el sector privado para la educación superior de los peruanos. Actualmente dos tercios de la matrícula en la educación superior son atendidos por universidades privadas. Gracias a ello, desde que se permitió la inversión privada en el sector, los claustros públicos han mantenido casi el mismo número de alumnos a través de los años: la ampliación de la cobertura ha estado a cargo del sector privado. Esto ha permitido que, con los aumentos del presupuesto estatal dedicado al sector, se logre mejorar significativamente la calidad brindada por las universidades estatales. Algo que sin lugar a dudas beneficia a los sectores más pobres de la población. Además, cabe señalar que el 74% de los alumnos de universidades privadas corresponde a los sectores C y E. Eso quiere decir que la iniciativa privada en el sector también beneficia directamente a los sectores emergentes de la población.

Finalmente, habría que destacar que una medida tan demagógica como el ingreso libre a las universidades traería como consecuencia inevitable una disminución del gasto público promedio per cápita en la educación superior, lo que inevitablemente generaría una notoria pérdida de la calidad de la formación que brindan las universidades estatales. Según el Ranking de Excelencia Universitaria 2021, elaborado por la Sunedu (Superintendencia de Educación Superior Universitaria), en el top ten de universidades del Perú, siete son privadas (cuatro asociativas y tres societarias) y solo tres son públicas. Una diferencia que se haría incluso mayor con el ingreso libre.

  • 22 de abril del 2022

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