Heriberto Bustos
Respetemos a las culturas
Reciprocidad, complementariedad, correspondencia y relacionalidad

Las acciones humanas si bien son de estricta responsabilidad de cada uno, en un colectivo deben responder a ciertas reglas de convivencia y de respeto a fin de asegurar relaciones de tolerancia. Allí radica la importancia de realizar ciertas advertencias para evitar o permitir que el irrespeto empiece a tomar cuerpo, más aún cuando so pretexto de mostrar una faceta “cultural” y ser expresada en acciones antojadizas que desdicen su esencia, se la ridiculice. Es el caso de las posturas que día a día vienen asumiendo algunos representantes del actual Gobierno mostrando desprecio por lo colectivo, dejando de lado o ignorando que la naturaleza de un Estado o de la sociedad política es la búsqueda del bien común. Y que se desnaturaliza y pierde su esencia cuando se corrompe o altera las reglas determinadas por ella misma para favorecer ciertos intereses, sean individuales o colectivos en desmedro de los demás.
Dado que, en nombre de los desposeídos, de los andinos y amazónicos se viene realizando despropósitos. importa recordar que la racionalidad andina, es decir la manera de pensar de quienes la asumen y hacen de ella una práctica cotidiana en su modo de vida, tiene sustento en principios que atañen a una concepción sistémica. Nos referimos a la relacionalidad (cada ente, acontecimiento, sentimiento, y posibilidad se halla inmerso en múltiples relaciones con otros entes); correspondencia (todos los campos de la realidad se corresponden de manera armoniosa); complementariedad (todo ente, toda acción, siempre coexiste con su complemento específico) y reciprocidad (la ética no está limitada al ser humano y su actuar, sino que tiene dimensiones cósmicas). De allí que lo mínimo a pedir a quienes tal vez sin conocer la esencia cultural andina pretenden enarbolarla con el absurdo propósito de enfrentar a los pobladores del país, es el respeto por la cultura a que hacen referencia.
Algo que debe quedar claro es que las concepciones, ideas, opiniones o maneras de entender el mundo o la realidad, van de la mano con orientaciones ideológicas que guardan coherencia entre lo que se dice y hace; de allí que resulte incomprensible que tras un verbo ideológico cultural andino, se escondan concepciones totalmente alejadas de la misma. Las cabezas más visibles del partido de gobierno se declaran marxistas, leninistas, maoístas, seguidores de ideologías occidentales en tanto sus orígenes y acciones corresponden a esos escenarios: Marx y Engels: alemanes, Vladimir Ilich (Lenin): ruso, Mao: Chino; quienes utilizaron las diferencias o contradicciones para lograr objetivos políticos (adecuados o no para sus realidades), mientras la cultura andina, ponderando los principios señalados, otorga a la complementariedad la razón de vida en comunidad al afirmar que la equivalencia e incompletitud entre los hombres, naturaleza y deidades, son condición necesaria para la existencia de la conversación y de la reciprocidad, en sociedades diversas como la nuestra.
El gobierno debe entender que los graves problemas por los que venimos atravesando no se solucionaran “prendiendo vela” a experiencias externas, sino encontrando en lo nuestro la imaginación y creatividad requerida para abordarlos, asimilando Que basándose solo en sus débiles y sectarias fuerzas, en lugar de resolverlos se agudizaran. Es hora de que Castillo se entere que el Perú es de todos los peruanos y los ciudadanos, y que es un deber primordial intervenir, según las propias posibilidades, en las distintas esferas de la vida pública.
COMENTARIOS