Predomina el pesimismo en las expectativas empresariales

Una de las variables más relevantes para la economía de un país son las expectativas, que tienen impacto en otros indicadores como la inflación, el tipo de cambio, el comportamiento de los consumidores y de los inversionistas, entre otros. Estos indicadores pueden variar en un periodo de tiempo a raíz de las expectativas, e impactarán en la marcha de la economía de un país si las expectativas indicadas se transforman en hechos concretos, debido a factores internos, la influencia negativa de factores económicos y geopolíticos externos, o un evento inesperado que afecte la economía, en base a lo expuesto veamos las últimas expectativas empresariales en el Perú en este año.

Según la última Encuesta Mensual de Expectativas Macroeconómicas del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), publicadas en la Nota de Estudios N° 71 del pasado 8 de octubre del año en curso, casi todos los indicadores de expectativas en el mes de septiembre del 2021 con respecto a agosto del 2021 se mantienen en terreno pesimista (índice menor a 50), el índice de la economía a 3 meses paso de 33.6 a 35.0 puntos, el índice sobre la economía a 12 meses paso de 43.5 a 44.5 puntos, el índice del sector a 3 meses pasó de 42.4 a 44.8 puntos, el índice del sector a 12 meses pasó de 49.8 a 51.7 puntos, el índice de la situación de su empresa a 3 meses paso de 46.2 a 46.6 puntos, el índice de la situación de su empresa a 12 meses pasó de 51.8 a 54.2 puntos, el índice de la demanda de sus productos a 3 meses paso de 48.1 a 49.5 puntos, el índice de la demanda de sus productos a 12 meses pasó de 54.4 a 56.2 puntos, el índice de contratación de personal a 3 meses pasó de 44.1 a 46.3 puntos, el índice de contratación de personal a 12 meses pasó de 48.6 a 52.3 puntos, el índice de inversión de su empresa a 3 meses paso de 39.4 a 40.0 puntos, y el índice de inversión de su empresa a 12 meses pasó de 46.3 a 48.6 puntos.

Considero que los resultados de la citada encuesta, básicamente se debieron a los efectos catastróficos de un evento inesperado que afectó no solo nuestra economía, sino la del mundo entero, la pandemia del Coronavirus Covid-19. Pero también fueron fruto del contexto interno que continua golpeando a nuestro país, como el ruido político, conflictos sociales (toma de la estación 5 del Oleoducto Norperuano, anuncio de paro nacional de transportistas, bloqueos de vías, agresiones a campamentos mineros, entre otros), sumado a ello las denuncias de corrupción difundidas por los medios de prensa, el aún alto nivel de inseguridad ciudadana y las trabas burocráticas.

A todo ello se suma un difícil contexto económico externo, donde los precios internacionales de los cereales se mantienen al alza, empujando al incremento de los precios de productos de primera necesidad, el impacto que pueda tener en el mundo financiero global la crisis de la gigantesca inmobiliaria china Evergrande, el alza del precio del petróleo, caída del precio del cobre, entre otros.

En el aspecto geopolítico externo, la escalada de las tensiones militares entre Estados Unidos y Rusia, China, Siria, Irán, Corea del Norte, entre otras potencias militares, y las repercusiones de su humillante derrota militar en Afganistán son, a entender de muchos, el motivo del pesimismo de las expectativas empresariales que se pueden agudizar e influir de manera nefasta en algunos indicadores de nuestra economía y en el comportamiento de los inversionistas, tanto locales como extranjeros, en lo que queda de este año y el entrante.

En tal sentido, es fundamental que se tomen acciones inmediatas para cambiar esta situación y mejorar las expectativas empresariales. La gestión del Gobierno no tiene otra opción que aclarar y combatir eficiente, eficazmente y con transparencia los citados problemas internos que golpean nuestro país,respetando el marco constitucional, ser proactivo al impacto que puedan tener en nuestro país el contexto geopolítico externo y tomar todas las acciones preventivas y correctivas para atenuar eficazmente la propagación de la pandemia citada, considerando que la variante Delta Plus (altamente contagiosa), se viene expandiendo en nuestro país.