¿Construyendo un andamiaje de corrupción?

Análisis minucioso y crítico del proyecto de ley de control de armas de uso civil

De nada servirá cualquier esfuerzo que realice el flamante ministro Segura para reactivar nuestra economía si los demás sectores continúan generando barreras absurdas, sea para cobrar la plata que necesitan -y el Gobierno no les da- mediante tasas altas por requisitos imaginativos o abusivas multas, sea porque en fiel aplicación de la doctrina que nos hundió durante la dictadura militar, prohiben u obstaculizan lo que no entienden.

La Gestapo tropicalizada bajo el logo de ¨Defensa Civil¨ estorba absurdamente todo esfuerzo formal de acción empresarial o emprendimiento productivo, al extremo de obligar a una oficina a retirar un microondas porque no hay conexión a tierra, precaución indispensable, según ellos, ante la probabilidad de que caiga un rayo….en Lima. Capítulo particular merecen los inspectores laborales. Visto solo parece torpeza.

Si a eso sumamos que este gobierno dejó claro desde un inicio que, para evitar conflictos sociales, es aceptable y deseable rendirse ante cualquier reclamo disparatado contra la inversión en industrias extractivas, generación de energías o construcción de nuevos penales. Habría que añadir Cobardía.

Agreguemos ahora la porfiada insistencia del  SUCAMEC en construir un andamiaje legal que no servirá para cosa distinta que para favorecer la corrupción y el abuso, facultando de taquito la formación de cuadros paramilitares en el seno del gobierno, armados con nuestro dinero y con un régimen particular. El hedor a mala leche se hará evidente.

Advertí desde el inicio que tanto la Ley vigente como el Proyecto de ley que hoy se analiza en la Comisión de Defensa -como siguiendo orden o instrucción cubana- atentan contra el derecho a la propiedad, el derecho a la libre asociación y el derecho-deber de defensa de los ciudadanos honestos. Y de paso hiere de muerte el Tiro Deportivo, la disciplina que más medallas nos ha dado.

Pero el daño que el proyecto de ley va a causar no queda ahí. Evidentemente lo saben sus creadores, por eso se han preocupado de eliminar de su versión final toda presencia de los representantes de los usuarios y de las empresas que serán afectadas, incluso a aquellos que su texto obliga a colaborar como la Sociedad Nacional de Seguridad, que agrupa los empresarios formales del sector. Acto seguido se afirma falazmente que el proyecto “ha sido consensuado”.

¿Para qué, sino para la corrupción, se propone absoluta discrecionalidad del funcionario para conceder o negar lo solicitado aún cuando el peticionario cumpla todos los requisitos de ley?

¿Para qué, si no es para el abuso, se constituye un ente con ¨presunción de veracidad eslabonada, con capacidad de imponer la sanción más alta hasta por la infracción más leve, anulando de paso los efectos protectores de la acción contenciosa administrativa?

¿Qué cosa distinta de un negociado se puede buscar empujando fuera del mercado al único fabricante de perdigones de plomo y a los pocos comercializadores legales de armas. Guarda relación con el anuncio de la pistolas de FAME?

Urgen respuestas y correcciones.

Por Dardo López-Dolz
(23 Set 2014)